Brisa & Adrian

Niños, Dios los bendiga...

A través de los años vamos viviendo experiencias, en las cuales, día que pasa nos alejamos mucho más de la ligereza que significa ser niños. Muchos nos convertimos en personas serias y profesionales pero tenemos un talón de Aquiles y son los miedos. La vida tiene momentos hermosos como también complicados y muchas veces caemos en el temor de volver a equivocarnos asumiendo que seremos rechazados socialmente, ya sea en el trabajo, en la familia, etc. y ese es uno de los más grandes factores por los que vamos llenando la carga sobre nuestras espaldas y llega un día en el que quebramos nuestra resistencia y nos caemos, pero no simplemente caemos y ya, muchas veces repetimos el patrón y cada vez caemos mas profundo.

Es así que al tocar lo más hondo, el levantarnos empieza a ser un proceso de mucho tiempo… La vida nos muestra muchos milagros, el simple volar de un ave, planear y dejarse llevar por el viento es una de las cosas más increíbles que podemos observar en este proceso. El nacimiento de los nuevos seres, la luna, el sol, las estrellas, etc. Infinidad de cosas que son un milagro revelado.

Cuando estamos ya grandes, muy pocas cosas nos sorprenden, pero al ver a estos hermosos niños disfrutar de lo más simple, correr en la vegetación seca, ya que estamos en invierno, hace que nuestro corazón recuerde con nostalgia tan maravillosos momentos que seguramente vivimos en nuestra infancia.

Debemos observar y aprender a ser más cómo ellos ya en nuestra edad adulta, dejarnos sorprender por las simples y grandes cosas, reír incansablemente y seguir soñando sin importar ser aceptados o rechazados en nuestra sociedad. Somos seres de luz y debemos brillar aún la vida se ponga en modo difícil.

Gracias por toda su hermosa energía, a los papitos que nos permitieron disfrutar una mañana increíble junto a sus hermosos Brisa y Adrián.

Salir de la zona cómoda y atreverse a jugar como niños nos emociona mucho!!!

Gracias, gracias, gracias!

Eternos Tiempos de Amor!